Cuando empezamos a jugar al pádel, muchas veces nos dejamos llevar por la intuición, vemos la pelota venir y nos centramos en intentar pegarle sin saber que existen diferentes golpes de pádel que puede hacerte ganar el partido.

A veces fuerte, a veces suave, pero sin pensar demasiado en el por qué. Sin embargo, el pádel es mucho más que eso. Es un deporte de situaciones, de velocidades, de estrategia. Y no, pegarle más fuerte no siempre es mejor. 

Con el tiempo, vamos entendiendo que cada punto pasa por distintas fases, y que hay un golpe adecuado para cada una. Saber elegir el golpe correcto en el momento justo puede marcar la diferencia entre ganar o perder un punto o un partido.

¿Cuáles son los golpes de pádel?

En función de la situación de juego, podemos agrupar los golpes en dos grandes categorías: ofensivos y defensivos. 

Aunque casi todos los golpes, por el propósito que tengan, pueden ser defensivos u ofensivos, hay situaciones en las que por norma general predominan unos sobre otros. 

Golpes ofensivos

Son los que se dan normalmente cerca de la red, o en situaciones donde podemos llevar la iniciativa. Aquí el objetivo cambia: queremos presionar, mover al rival, forzar el error o directamente cerrar el punto. 

Golpes defensivos

Los golpes defensivos tienen un objetivo claro: aguantar el punto y contener a los rivales. No buscan ganar el punto, sino encontrar una oportunidad cómoda para contratacar y ganar la red, desde donde sí intentaremos definir. 

Ahora que ya tenemos claro el enfoque de cada tipo, vamos con el desglose de los golpes más comunes y su uso.

Tipos de golpes en pádel

En el pádel no todo es pegar fuerte. Cada golpe tiene su momento y su intención, ya sea para defender, presionar o cerrar el punto.

Conocer los diferentes tipos de golpes de pádel es clave para entender el juego, adaptarte a cada situación y tomar mejores decisiones en la cancha. Aquí te dejamos los más habituales y cómo usarlos según el contexto.

Saque 

Es el golpe que inicia el punto. Aunque no es tan determinante como en el tenis, un buen saque puede ponerte en ventaja desde el primer momento. El objetivo suele ser poner en apuros al restador para que devuelva una pelota fácil y subir a la red para empezar el punto con la iniciativa. 

Volea 

Golpe clave en ataque. La volea en pádel se realiza cerca de la red, antes de que la pelota pique. Su función es mantener la presión sobre el rival, moverlo y forzar el error. No siempre hay que volear fuerte, también hay voleas de contención, cuando la pelota que viene de los defensores es firme y potente, o cuando golpeamos por debajo de la altura de la red.  

Bandeja 

Golpe de control y contención para mantener la red. No es agresivo, suele buscar profundidad para que nos de tiempo a recuperar y llegar a la red.  

Víbora 

Cuando el globo rival es más corto o podemos colocarnos bien con los pies fijados en el suelo antes golpear, en lugar de bandeja haremos una víbora. Más agresiva y con efecto lateral, buscando complicar la devolución del rival. Es un golpe ofensivo que, bien dominado, puede generar muchas ventajas. 

Globo 

Posiblemente el golpe más infravalorado y el más importante. Aunque parezca un recurso defensivo, un buen globo puede conseguir alejar al rival de la red, y que nosotros podamos ganar la posición. Sin embargo, es un golpe que exige elegir bien el momento para usarlo, ya que si no es bueno el rival nos castigará con un remate, una víbora o sacándola de la cancha por cuatro. 

Contrapared 

Recurso defensivo con el que el jugador golpea la pelota contra su propia pared o cristal para que vuelva al campo rival. Se usa en situaciones extremas, cuando no tenés tiempo de devolver la pelota directamente.  

Salida de pared 

Si es una pelota que rebota alto podremos usarlo como recurso ofensivo y si por el contrario el rebote lo da en la parte baja del cristal o de la pared será una forma de ayudarnos y ganar tiempo para defender las pelotas rápidas que manda el rival desde la red. 

Chiquita 

La chiquita es un golpe corto y suave que se utiliza para colocar la pelota por debajo de la altura de la red cuando el rival está esperando volear. Su objetivo es romper el ritmo y obligar al rival a moverse hacia adelante, creando huecos. 

Remate 

El golpe más espectacular y decisivo. Si el globo del rival queda corto, el remate es la mejor opción para cerrar el punto. Puede ser plano, con efecto o incluso buscando sacarla por 3 o por 4. Potencia y precisión se dan la mano en este golpe. Exige una buena técnica y coordinación.  

Dormilona

Golpe sutil y técnico que se ejecuta cerca de la red, tocando la pelota suave para que cruce y caiga muerta. Es una gran respuesta a un remate fuerte del rival, sobre todo si queda cerca de la red. No busca potencia, sino sorprender con precisión y mucho tacto.

Conclusión 

En el pádel no es mejor quien le pega más fuerte, sino quien sabe elegir el golpe correcto en el momento adecuado. Cada situación del juego requiere una respuesta distinta, y dominar los distintos golpes te dará más herramientas para competir mejor, para seguir subiendo tu nivel, para divertirte y para ganar más puntos.